Mercurio ha puesto sus páginas a disposición de una
sospechosa ofensiva dirigida contra el Museo de la Memoria. En su edición
del día 22 de Junio, el historiador Sergio Villalobos publica una dura crítica
donde afirma que la creación del Museo “ha sido una continuidad de disparates”,
agregando más adelante: “En el mencionado "museo", para poder
entenderlo, falta la política y la situación social del país desde varias
décadas anteriores y, muy especialmente, la destrucción de la ética pública,
los abusos, engaños y desmanes del gobierno de la Unidad Popular.
Sólo teniendo en cuenta esos hechos, se puede comprender la reacción general
del país y el movimiento militar. No se trata de ocultar los excesos oficiales,
sino buscar la explicación de por qué ocurrieron.”
Ayer se incorporó a esta ofensiva Margarita Krebs, actual directora dela DIBAM , a quién El Mercurio
le concede una extensa columna en la sección cartas al director, donde coincide
con el señor Villalobos al sostener “ A la luz de la contingencia que vivimos
hoy, sería una gran contribución que el Museo explicara los hechos anteriores
al golpe, pues pondría una nota de atención sobre los límites, la necesidad de
cuidar las formas, y los procedimientos democráticos.”
La humanidad está hoy consciente del holocausto cometido por el régimen nazi desde que asumió el gobierno de Alemania el año 1933, hasta el fin de la segunda guerra mundial en 1945.
Ayer se incorporó a esta ofensiva Margarita Krebs, actual directora de
La humanidad está hoy consciente del holocausto cometido por el régimen nazi desde que asumió el gobierno de Alemania el año 1933, hasta el fin de la segunda guerra mundial en 1945.
Muchos museos se han construido en el mundo a fin de dar a
conocer las acciones criminales cometidas por dicho régimen, con la finalidad
de evitar su repetición y educar a las nuevas generaciones en la preservación y
el respeto a derechos fundamentales del ser humano.
Tal es el caso del Museo Estadounidense del Holocausto,
construido en Washington DC, como consecuencia del informe presentado en 1979
por la Comisión
Nacional del Holocausto que presidió Jimmy Carter También el
Museo del Holocausto en Jerusalem, la
Torre del Holocausto en Berlín y el más reciente Museo del
Holocausto también en Berlín, levantado simbólicamente en un terreno próximo al
bunker donde se refugió Hitler en sus últimos días.
En ninguno de estos museos, se pretendió explicar el contexto político social de la época para justificar las atrocidades cometidas por los nazis. Conforme a la argumentación sostenida por los detractores de nuestro Museo, quienes diseñaron tales centros estarían tergiversando la verdad al ignorar las enormes debilidades dela República
de Weimer: la hiperinflación que llevó al colapso de la moneda alemana, la
cesantía que afectó a 5 millones de alemanes, el desabastecimiento, la
violencia cotidiana desatada –dicho sea de paso por las propias huestes de las
SS- emuladas más tarde en Chile por las criollas bandas de Patria y Libertad,
todo lo cual pavimentó el acceso de Hitler al poder.
¡No señor Villalobos y señora Krebs!
Nada puede justificar el haber incinerado a 6 millones de judíos, así como no hay ningún contexto o causa que pueda justificar la sistemática violación a los Derechos Humanos cometidas por la dictadura militar en Chile.
En ninguno de estos museos, se pretendió explicar el contexto político social de la época para justificar las atrocidades cometidas por los nazis. Conforme a la argumentación sostenida por los detractores de nuestro Museo, quienes diseñaron tales centros estarían tergiversando la verdad al ignorar las enormes debilidades de
¡No señor Villalobos y señora Krebs!
Nada puede justificar el haber incinerado a 6 millones de judíos, así como no hay ningún contexto o causa que pueda justificar la sistemática violación a los Derechos Humanos cometidas por la dictadura militar en Chile.
Ningún error o supuesta violación de la legalidad puede
justificar la desaparición de miles de compatriotas, Nada puede justificar su
sepultación clandestina, la posterior inhumación de sus restos, ya sea para ser
dinamitados o para ser arrojarlos a las profundidades del mar con un riel de
ferrocarril atado a sus cuerpos.
Nada puede justificar los terribles tormentos aplicados a decenas de miles de compatriotas. Nada puede justificar la existencia de centenares de centros clandestinos de detención y tortura, extendidos lo lago de todo el país. Nada puede justificar que se haya construido en Isla Dawson un campo de concentración al modelo de Auchwitz. Nada puede justificar el exilio forzoso de miles de familias separadas para siempre de sus raíces. Nada puede justificar las universidades intervenidas, etc,etc,etc……
No menos grave es el hecho que a estas alturas de la vida, con tantos y tan irrefutables testimonios conocidos en los procesos llevados a cabo por nuestro Poder Judicial, el señor Villalobos, a quién el Estado de Chile le concedió el Premio Nacional de Historia, califique como excesos oficiales las monstruosas violaciones a los derechos humanos cometidas por la dictadura.
Está claro que la defensa de los Derechos Humanos es una tarea permanente. Nuestra obligación es poner atajo a quienes ayer cerraron sus ojos respecto a lo que ocurría delante de ellos y hoy pretenden construir un país desprovisto de su memoria.
Miguel Lawner
24. 06. 2012.
Nada puede justificar los terribles tormentos aplicados a decenas de miles de compatriotas. Nada puede justificar la existencia de centenares de centros clandestinos de detención y tortura, extendidos lo lago de todo el país. Nada puede justificar que se haya construido en Isla Dawson un campo de concentración al modelo de Auchwitz. Nada puede justificar el exilio forzoso de miles de familias separadas para siempre de sus raíces. Nada puede justificar las universidades intervenidas, etc,etc,etc……
No menos grave es el hecho que a estas alturas de la vida, con tantos y tan irrefutables testimonios conocidos en los procesos llevados a cabo por nuestro Poder Judicial, el señor Villalobos, a quién el Estado de Chile le concedió el Premio Nacional de Historia, califique como excesos oficiales las monstruosas violaciones a los derechos humanos cometidas por la dictadura.
Está claro que la defensa de los Derechos Humanos es una tarea permanente. Nuestra obligación es poner atajo a quienes ayer cerraron sus ojos respecto a lo que ocurría delante de ellos y hoy pretenden construir un país desprovisto de su memoria.
Miguel Lawner
24. 06. 2012.
No hay comentarios:
Publicar un comentario